FESTIVAL DEL MACABEO

Ingredientes:

Guineos Verdes
Carne molida de res guisada a su gusto
Aceite de achiote
Sal o adobo a gusto
Hojas de guineo o paño
Aceite vegetal para freir

Procedimiento

Hierva 3/4 partes de los guineos a utilizar. Deje 1/4 parte de éstos crudos. Maje los guineos hervidos y gualle los guineos crudos. Mezcle la masa de los guineos crudos con los majados, siempre velando por la consistencia de la masa. Sazone la masa y añada un poco de aceite de achiote para darle color. Deje la masa reposar un rato. Con una cucharada grande, vierta un poco de aceite de achiote sobre una hoja de guineo o paño. Ponga una porción de la masa y distribúyala.  Luego, rellene la masa con la carne molida y selle dándole la forma de media luna. Fría en aceite bien caliente hasta que se dore por ambos lados.

MACABEO

TRUJILLO ALTO

RECETA

El Festival del Macabeo se comenzó a celebrar desde el año 1983. Es una celebración en honor a la fritura autóctona de Trujillo Alto, confeccionada a base de masa de guineos verdes (rallados y majados) y rellena de carne. 

Este festival cultural da inicio a mediados del mes de diciembre, con música típica, concursos de trovadores para niños y adultos, artesanías y quioscos.

El macabeo, fritura hecha a base de masa de guineo y rellena de carne.

Origen

A principios del Siglo 20, apareció en la mesa trujillana la fritura del Macabeo.  Se le atribuye a Doña Carmen Romero, esposa de Don Andrés Valcárcel, Alcalde de este pueblo por 34 años, el haberlo confeccionado por primera vez.  Es de suponer que después de haberlo compartido con algunos vecinos, éstos aprendieron la receta.

Entre las personas que continuaron confeccionado este delicioso manjar artesanal se encontraban: Doña Romualda Báez, Doña Francisca "Cica" Maldonado, Doña Evangelina "Vangela" Montañez, Doña Gabina Andino, Doña Juana Camacho y Doña Juana Cruz.

El Macabeo, pasó de ser una fritura de consumo familiar, a ser un producto de venta, que le permitió a muchos de sus elaboradores ganarse el sustento de sus familias.

De generación en generación algunas de estas familias han preservado la tradición de confeccionar este sabroso elemento autóctono del arte culinario de nuestro pueblo.  Tales son los casos de David Zayas y Cándida Jiménez, hija de Doña Juana Camacho.  Estos, continúan en nuestros días elaborando con inigualable destreza y sabor este delicioso manjar.